La velocista Allyson Felix, de Estados Unidos, acaba de ganarla 12a medalla de oro en atletismo, en la Copa del Mundo de Doha.
Esto la coloca no solo entre los gigantes de la historia del deporte: hoy en día, es la más grande de todos, reinando absoluta después de batir el récord de nada menos que la leyenda Usain Bolt.
La hazaña de Allyson da algo de qué hablar y pensar, considerando que ella fue desacreditada cuando quedó embarazada, perdió apoyo económico, en un episodio que generó desacuerdos con marcas como Nike. Aún así, regresó al entrenamiento de rutina solo dos meses después de dar a luz, luego de enfrentar un embarazo de alto riesgo y complicaciones que la llevaron a una cesárea a las 32 semanas de gestación.
“Tuve que luchar mucho este año, por mi salud, por mi hija, por las mujeres y las madres, por lo que merezco y por mi forma física. Estoy muy orgullosa de estar en mi noveno campeonato mundial y este es más especial porque mi bebé está en el estadio para verlo todo ”, publicó la diva en su cuenta de Instagram.
Ver esta foto en Instagram# 9 La vida se ve diferente. Cammy tiene 10 meses hoy. Descubriendo esta vida de mamá. He tenido que luchar mucho este año, por mi salud, por mi hija, por las mujeres y las madres, por lo que merezco y por mi forma física. Estoy muy orgulloso de estar en mi noveno campeonato mundial y este es muy especial porque mi bebé está en el estadio para verlo todo. #WorldAthleticsChamps
desigualdad de inversión en mujeres deportistas lleva mucho tiempo en la agenda y, aquí en Brasil, la causa cobró aún mayor repercusión cuando la estrella Marta, embajadora mundial de ONU Mujeres, durante el Mundial Femenino 2019, utilizó sus botas como plataforma de protesta por igualdad de género en el mundo del fútbol.
Casos como estos, denunciados a diario, llevaron a la poderosa Melinda Gattes a anunciar, recientemente, una inversión de mil millones de dólares, durante los próximos 10 años, en proyectos y acciones que promuevan una reversión de este escenario desfavorable para las mujeres en Estados Unidos.
El ejemplo de Allyson es un escalofrío para quienes aún dudan de las habilidades de las mujeres.. En medio de la agitación natural de los primeros meses de maternidad, y aún teniendo que lidiar con complicaciones adicionales, sin saber que era imposible romper el récord de Usain Bolt, fue allí y lo hizo.
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